Nueva versión del diario del viaje de Cantalapiedra a San Petersburgo

María del Pilar Cabildo Miranda ha publicado recientemente el libro "Entre Salamanca y San Petersburgo. Recuerdos de doña María Manuela de Onís", nueva versión del diario del viaje de Cantalapiedra a San Petersburgo.

El texto que se puede leer en la contraportada del libro es el siguiente: "Doña Manuela de Onís nace en el seno de una familia de diplomáticos y es educada exclusivamente para conseguir un buen partido. Pero se ve envuelta en situaciones adversas y aparece una mujer fuerte que se adapta a ellas. Su vida atraviesa momentos históricos, como la Revolución francesa o la Guerra de la Independencia, o acontecimientos ocurridos en la corte de Catalina II de Rusia. Ella misma nos ofrece una visión profunda de la vida aristocrática y diplomática del siglo XVIII y sumerge al lector en una época de intrigas, dando lugar a la reflexión sobre temas de clase, género y poder, desvelándonos a su vez sus emociones, como el miedo o el amor".

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Así comienza el original:

VIAJE DE MME. DE ONÍS DESDE CANTALAPIEDRA EN CASTILLA LA VIEJA, A SAN PETERSBURGO, CORTE DE RUSIA

(19 Agosto 1792 - 3 Enero 1793)

El 19 de agosto de 1792 salimos de Cantalapiedra.* Desde esta villa hasta Arévalo no hay cosa de particular; el camino es bueno; solo en el invierno, si llueve mucho, es un poco incómodo por causa del río Madrigal y el de Castellanos, que no tienen puentes, y a veces no se puede vadear. Arévalo es una villa muy bonita y bastante grande. Desde aquí hasta la Venta de Almarza no hay tampoco nada que merezca la atención; el camino es también bueno. Desde esta Venta empieza el camino hecho y leguas medidas. Estas están señaladas con unas columnas de piedra y escrito de cada una de aquí a Madrid tantas leguas. En Villacastín o antes empiezan las montañas y piedras grandísimas de granito, y los espesísimos bosques de encina y pinos que toman el nombre de esta villa, cuyas bellotas son grandes y deliciosas. Poco después hay una posada que se está haciendo por cuenta del Rey; una legua más acá hay una fonda que también ha ordenado hacer el Rey; una y otra son muy hermosas y eran muy esencial. Luego que se sale de esta fonda, inmediatamente se empieza a subir el Puerto de Guadarrama; la subida es muy suave, y el camino el mejor que hay tal vez en Europa. Al acabar la subida hay un león de piedra muy grande, puesto sobre un pedestal, que sirve de límite de los de Castilla. En el pedestal hay una inscripción que dice:……. Afortunadamente hay una copia del manuscrito, firmada por M., rubricada y fechada en 1915, que permite salvar las lagunas del original. Por la fecha podría tratarse de Mauricio Carlos de Onís López y, cotejada la letra con otros escritos suyos, pertenece a él. 

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