Atalaya

Revista del colegio comarcal de Cantalapiedra


Espacio dedicado al acceso a la revista Atalaya, revista del colegio comarcal de Cantalapiedra


Don Evaristo Hernández, maestro que fue del colegio comarcal de Cantalapiedra ha querido crear un espacio para poder mostrar escaneados los números de aquella revista que creó la comunidad educativa de la localidad y pueblos de la comarca.

En el siguiente enlace de Google Drive se puede acceder a los números de la revista Atalaya escaneados:

https://drive.google.com/drive/u/0/folders/1fwm02zVH5e1jpdURrY_LJsBzkq7hB7fw?fbclid=IwAR0KcwXhrFup12xeqnEsMba4ufFHD00stO0qp4qcGUci9fvZbGbOhD-ZpjI


Carta publicada por D. Evaristo:

Empeñado en hacer recordar el pasado a quienes no renuncian a él, os dejo un enlace con las revistas escaneadas que conservo. Faltan algunas pero o bien las imagináis -la fantasía da para todo- o bien, si alguien tiene esos números, hace lo mismo y los pone a disposición de todos. O si prefiere me los envía (las copias escaneadas) y las incluimos en este enlace. 
Abonado a la pereza en que ando sumergido, y obligado a escribir un artículo que me habían solicitado, pensé poder salir del apuro con uno que recordaba tener en una revista del cole. Lo encontré. Y, ya de puesto, se me ocurrió lanzar una foto al facebook a ver qué reacciones producía. Parece ser que removió memorias y emociones y alguien pensó que sería estupendo poder escanearlas.
Atalaya es recuerdo y obra vuestra (alumnos) y nuestra (maestros, colaboradores...), Y eso incluye no solamente los nombre que en ella figuran, sino los de cuantos participaron en la realización de trabajos que no aparecen, de quienes propusieron temas, de los que criticaban, alababan, ayudaban, comentaban, preguntaban.... Entre todos hicimos el camino. Por tanto, este trabajo y este recuerdo nos pertenece por igual. 
Os escribí, cuando os dejé los vídeos, que la distancia en el tiempo da otra visión diferente a la del día a día, Espero que estéis de acuerdo. Creo que nos vamos quedando con la esencia del pasado. Y en este recuerdo de la esencia os repito, con absoluto convencimiento, que trabajamos bien. Sí, ya sé que habría de todo, pero también que formamos grupos estupendos y de afectos firmes. Y no es sólo mi opinión. Hace bien pocos días doña M. Carmen me pidió que transmitiera su cariño para cuantos habían pasado por sus clases. Que fue un tiempo que no olvida. Ese mérito esta en vuestro haber. Suyo también, por supuesto. 
Centrándome en la revista (Juanjo nos recordó que el título se eligió por votación) es preciso que la situemos en el tiempo, es decir hace treinta y cinco años y en los medios: una máquina de escribir –veréis que en los últimos números disponíamos de una electrónica. Gran avance-. Mucho ha cambiado la sociedad, la tecnología, los modos de vida, la educación y la enseñanza (reflexión particular mía: en este campo demasiado poco). 
El colegio era comarcal y los padres de los alumnos de los pueblos adscritos encontraban en ella un nexo con el colegio. No se pensó (me responsabilizo casi en exclusividad de lo negativo y algo de lo positivo) en un compendio de trabajos de alumnos. Esa podía haber sido otra opción.
Si observáis los distintos números, veréis que hubo una serie de epígrafes que se mantuvieron de forma permanente , o casi:
1- Un apartado dedicado a la lectura. No podía faltar. Dirigido no solo a los niños, sino también a ex alumnos y padres. He de hacer alusión al funcionamiento y uso de la biblioteca. Magnífico. Me siento particularmente satisfecho por cómo os implicabais, la organizabais y la utilizábamos.
2.- Nos gustaban las tradiciones y solía haber una sección dedicada a ellas, porque se nos morían. Y los refranes. Algunos de ellos ya quedan mejor en la maleta de cartón empolvada que pervive en el sobrado.
3.‐ Pretendimos dar voz a personas u organismos ajenos al centro. De ahí surgió el Tomo la Palabra. Pero la palabra la teníais vosotros y cuantos tuvieran algo que aportar, alabar o criticar.
4.‐ Reflexionar, aunque sea poco, no era ni es malo. Alguna página dedicábamos a ello.
5‐ Mientras estuvo doña Pepita tenía relevancia la entrevista, que me parece que luego desapareció.
6.‐ Fantástico. La sección de cocina tenía un gran seguimiento, según alguna encuesta que hicimos, Surgió, casi, como un elemento de relleno y se nos convirtió en una estrella.
7.‐ Siempre tuvimos presente vuestro momento escolar y considerábamos necesario dar alguna información legal, de utilidad para vosotros y sobre todo para los padres, de lo que os esperaba con la EGB y las posteriores etapas. Andábamos (como siempre) con la implantación de una nueva ley de educación , en este caso la LOGSE, que no era poca reforma.
No podía, pues, faltar alguna reseña. Mencionar y de nuevo agradecer, tanto a los que están como a los que habitan otros mundos, la participación desinteresada de personajes, perdón, personalidades, con relevancia en el ámbito salmantino, o incluso nacional, como era el caso de D. Enrique de Sena, Jorge D`Alesandro, Ángel Carril o el entonces joven director del Adelanto, Carlos del Pueyo.
Ahí os queda el enlace. Juzgarla, disfrutarla, recordarla. Revivid vuestro cole si sentís añoranza o sumergiros en otras etapas más amables de vuestra vida. En cualquiera de vuestras situaciones os envío un sincero abrazo.
Evaristo

Sería bueno que la compartierais para que llegara al máximo de ex alumnos, incluidos, naturalmente, nuestros amigos de Palacios, Tarazona, Villaflores, Poveda.