El viento evitó que Santa Águeda pudiera dar la vuelta completa a la plaza Ramón Laporta en su primera procesión realizada un día distinto al 5 de febrero.
Las águedas acudieron a buscar a su casa a Maria y Mariví, mayordomas de este año, para todas juntas acudir al Ayuntamiento a tomar el mando de la localidad. Felicitas recogió el bastón de mando de manos de la alcaldesa del municipio. Posteriormente se realizó el primero de los desfiles hacia la iglesia de Santa María del Castillo, donde tendría lugar la Eucaristía por Santa Águeda. Este año se ha adelantado esta celebración al día previo a Santa Águeda. Posteriormente se realizó una bella procesión encabezada por la cruz, portada por Misericordia, y tras ella el resto de águedas custodiando a Santa Águeda. Después de Santa Águeda, iban Mariví y Mari Carmen vestidas con un traje como el atribuido a Santa Águeda con las varas de mayordomas. Entre ellas caminaba el sacerdote y párroco de la localidad, don Anastasio. El viento no permitió que la comitiva pasara de a esquina de los pendones y hubo que volver en sentido contrario. Dicha circunstancia hizo que la primera procesión de Santa Águeda que se cambia de día, no se pudiera realizar al modo acostumbrado.
El restaurante Tito fue el lugar elegido por las mayordomas para ofrecer un suculento agasajo a todas las águedas y posteriormente la pasta corrió a cargo de Juani González (alcaldesa) y Beatríz Zurdo, que tomaron las varas de mayordomas de la fiesta de Santa Águeda del año que viene.
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