Hoy, 21 de junio, ya en verano, primer día después del estado de alarma, ya se puede viajar entre provincias dentro de España. Las personas que tienen su segunda casa o la vivienda familiar pueden volver a disfrutar de la misma. Los pueblos acogen la llegada de los forasteros, como así se dice en Cantalapiedra.
Las localidades despiertan y se llenan de alegría. Muchos abuelos pueden volver a ver a sus nietos, hermanos, primos, sobrinos, tíos o amigos. Es un momento de reencuentro deseado. Las calles de la vieja Castilla despiertan.
La pandemia, epidemia, virus tienen en vilo a la población, hay miedo, necesaria precaución y prevención pero hay que evitar el odio y otra serie de manifestaciones nefastas que perjudican la vida en sociedad.
El acogimiento es un signo positivo y beneficioso para pueblos en los que estos días, la llegada de personas favorece otra serie de aspectos que redundan en el bien de la sociedad.
Bienvenidos forasteros, hijos de la villa o veraneantes a la muy buena villa de Cantalapiedra.