Se labran los campos
Unos días después de las lluvias, los
agricultores, ya pueden salir a hacer las labores y, precisamente eso, es lo
que está sucediendo en las tierras de labor. Las vertederas profundizan en los
rastrojos, dejando el terreno limpio y bien labrado, tal y como gusta en
Cantalapiedra. Un pueblo destacado por sus buenos agricultores y el buen hacer
de los mismos, manteniendo y cuidando de las tierras de labor esmeradamente
para producir el máximo posible. Algo que el año pasado se vio dificultado por
la falta de lluvias, pues ya había ganas de hacer las cosas bien en el campo.
Además, ahora que se acerca el día de los Santos, por ello,
las visitas al cementerio son constantes.
