Las personas
interesadas en aprender a nadar ya han comenzado, esta semana, los cursos de
natación en las piscinas municipales.
Cantalapiedra,
pese a no estar cerca del mar, ni a tener ríos de agua caudalosos, puede
presumir de contar con una población bien nadadora.
Las
fabulosas piscinas municipales, que durante el verano proporcionan, al menos,
cinco puestos de trabajo fijos, otorgan la posibilidad de disfrutar del agua y
de fomentar el deporte náutico gracias a la formación que imparten sus
socorristas.
Ahora,
prácticamente, todos los pueblos tienen piscinas pero, ni tan bien preparadas,
ni con las instalaciones que tienen las de Cantalapiedra. Nuestra localidad fue de los primeros pueblos que contaron con piscinas municipales. Además, estas instalaciones
cuentan con bar, pista de tenis y unas extensas áreas verdes, enriquecidas por
áreas con mayor o menor grado de sombra, a gusto del bañista.
El disfrute
del agua es un aliciente más agradecido por los veraneantes que eligen nuestra
querida Villa para disfrutar de su tiempo libre.