La característica plaza principal de Cantalapiedra es
grande e irregular. Cada edificio es distinto. Empezando por la iglesia que
ocupa el centro de la misma y pasando por edificios públicos como el
ayuntamiento o el centro de salud. De tal manera, que la vida social de la
Villa gira en torno a ella.
Lo más peculiar de la misma quizá sea su nombre, un
nombre propio: Ramón Laporta.
Todos conocemos el soportal de Alfonsito, que es donde se
ponen los anuncios. Junto con el soportal de Míster, son los más mentados.
Aunque también están el soportal del ayuntamiento, el de la mercería y el de la
señora María. En fin, cosas de un
pueblo.
Tiene la plaza muchas cosas más: bares, terrazas,
tiendas, un kiosco,.. y los columpios, en el centro y bajo sombra del “pino”, que son el lugar de la alegría gracias a la
presencia de los niños.