Nuestra Señora de la Misericordia a través de los ojos de Tambores

Nuestra Señora de la Misericordia volvió a ser homenajeada por el cariño de las gentes de Cantalapiedra. Entre las muestras de este entrañable aprecio se encuentra la de mi amigo Tambores, José García Martínez, que ayer me volvió a sorprender con un vídeo atrevido y emocionante que muestra el encanto de esta fiesta desde su mismo epicentro. Es un material audiovisual que deja ver el disfrute externo, la explosión en baile de un sinfín de reacciones humanas: racionales, emocionales y espirituales. Se trata de la grabación de lo más íntimo que trasciende a través de rostros iluminados por expresiones de niños, mujeres y hombres  que se ven invadidos por el encantamiento de una fiesta cargada de un legado intergeneracional especial..

Serán miles las fotos que se puedan realizar durante estos días de la Virgen de la Misericordia, sobre todo de los más pequeños obsequiando a esta madre celestial con sus besos o su espanto al ser colocados junto a una talla de madera que ya cuenta con décadas o siglos de antigüedad. Ella protege, al menos eso nos gusta sentir, percibir e invocar. En estas imágenes en movimiento regaladas por este señor devoto de una tradición se pueden ver símbolos y muestras de emoción que durante tiempos acompasaron con las dulzainas sus antepasados de apellido Martínez y que ahora entonan Alberto Iglesias, Mario Cabrera, Rubén Coria, Angel Benito, Julio López y quizá tantos otros desde el cielo.  Siempre me acordaré de Santi, Procopio,...el Cómico, Cotopín,.. y tantos que quizá desde el más allá nos contemplan y continúan haciendo sonar los instrumentos que siempre nos harán escuchar sonoros recuerdos cargados de tantos alicientes positivos para nuestro propio caminar.Sin duda, esta fiesta está cargada de momentos, acciones, pensamientos, regresiones y pasiones que ahondan en lo más profundo del ser humano. 

¿Quién, con cierta edad, al llegar a la ermita, escuchar el sonoro rumor del lugar, el tintineo de la campana, las notas de la dulzaina, los vivas, la Salve y otra serie de invocaciones y rituales no siente un sinfín de sensaciones y es invadido por imágenes de otros tiempos, por recuerdos que nos hacen ver de nuevo a esas personas queridas que tanto nos aportaron, que tanto enriquecieron a la buena villa con su presencia, con sus acciones y omisiones..?  
Y es que, la fiesta de la Virgen es un reguero de emociones desde el principio de la celebración, desde el momento en que se comienza a subir la cuesta que lleva hacia el verde parque, quizá uno de los entornos más cuidados por el cariño de un pueblo que reside, recibe y que retorna a sus raíces más profundas con esta ancestral celebración. 
La misa, fue oficiada, por suerte para los escuchantes, por José Luis Quintero, hijo de la villa, que en sus palabras transmite siempre ese amor a la madre celestial, y por supuesto a su querida madre terrenal, a la que frecuentemente visita y la que con gran alegría le recibe y por la que imagino que sobre todo él llega al pueblo y gracias a ello, a todos nos regala con su presencia y con el fruto de su vocación. Siempre da gusto escuchar hablar a alguien que en sus palabras porta el verdadero testimonio de quien dice y hace, es decir, predica con el ejemplo. Porque opino que hoy ya no es tan fácil encontrar eso.

Estas palabras se refieren al domingo 9 de junio de 2019, aún queda el lunes y el martes para continuar experimentando y sintiendo estas y otras muchas cuestiones, cada cual la suya o ninguna. Estas también son y forman parte de la vida. Las reacciones en ocasiones irracionales que inexplicablemente alimentan nuestro lado, quizá espiritual o de eso que no se sí se corresponde o se aproxima al alma.

Vídeo elaborado por Tambores, Jóse García Martínez: