Una fiesta en el Girón

Sería bonito que se establecieran nuevos eventos en el calendario festivo de Cantalapiedra. Pienso que uno muy aplaudido sería una fiesta en el barrio Girón. 

Hay algún precedente de fiesta en el Girón, como el que se vivió el Domingo del Señor del año 1983, cuando el Ayuntamiento contrató un grupo musical y los vecinos obsequiaron a la gente que participó con limonada y pastas. Fueron las gentes de este barrio las que propusieron esta iniciativa. 

Este barrio tiene una herida causada por la pérdida de la misa que hasta hace unos años se hacia en el mismo. Las gentes del lugar se sentían protegidas y este gesto era un beneficio para la Iglesia Católica, a la que se acercaban en fe estas personas. Queda en la memoria la negativa contestación a quienes pidieron que se recuperara por parte de Obispo, quien en una visita que hizo ese mismo año, según testigos, respondió en público y en persona de un modo brusco a las mujeres que le preguntaron. Esto fue un doble varapalo para las gentes de este lugar. Pienso y opino que el que una persona se vea como representante de Dios debería llevar implícita cierta humildad y respeto a los fieles.

Creo que sería bonito que desde, por ejemplo el Ayuntamiento se hiciera este esfuerzo de organizar algo para que en este espacio de la villa también se hagan cosas al menos una vez al año. Seguro que las gentes del barrio se prestan a participar si es necesario. 

Es esta una opinión escrita sin animo de ofender y con mis respetos a todos y todas, entre ellos a quienes ostentan cargos de responsabilidad religiosa.

P.D.: 
También tuvo gran éxito la fiesta del Girón organizada por propuesta de la Agrupación de Peñas hace unos años en las fiestas de septiembre, como bien recuerda Ernesto.