Las Ferias y Fiestas de Septiembre de 2013 han concluido con una jornada
marcadamente taurina, la del domingo 8.
Después de una noche intensa, comenzada el sábado con el encierro de las
once y media de la madrugada y continuada con el espectáculo musical que
terminaría pasadas a las ocho y media de la mañana con la diana floreada por
las calles de la Villa, se dejó un intervalo de tiempo mínimo para respirar,
solo hasta las once y media del mediodía en que comenzaría en encierro urbano.
Tres grandes novillos salieron del camión, uno por uno bajando hasta la
plaza y volviendo a subir, unas veces separados y otros juntos y la última con
los cabestros.
Los encierros de Cantalapiedra son así de peculiares, las reses suben y
bajan de la plaza mayor a la plaza de toros, y todos tan contentos observando
el ganado amenazador.
En esta ocasión, al parecer, hubo un corredor herido. Esperemos que sea
poco y se cure bien y lo más rápido posible.